[Columna LIdG] El balón de oro
enero 27, 2014 Deja un comentario
IÑIGO ARZA / Periódico Diagonal
Como todos los años, llega el momento en el que eso que llaman “el mundo del fútbol” elige al mejor jugador del mundo. Una especie de Eurovisión versión futbolera en la que la geopolítica y el amiguismo tienen tanto valor como la calidad del aspirante. La gala de este entorchado, lleno de americanas estridentes, peinados imposibles, un lujo innecesario y magnates de lo más variopintos siempre dispuestos a estar allí donde haya posibilidad de negocio, simboliza perfectamente el fútbol de élite actual. En las redacciones, los periodistas deportivos están a un nivel similar y el sensacionalismo más individualista ocupa portadas.
Mis recuerdos del Balón de Oro hasta hace unos diez años se basan en unos especiales que hacía la desaparecida revista Don Balón. Un número en el que presentaban a los candidatos y poco más, en los medios apenas se le concedía importancia. La individualización del fútbol se ve en estos detalles. Una auténtica guerra mediática, con políticos, directivos y leyendas del fútbol exigiendo que su favorito sea el ganador. Y por supuesto, en la base de la pirámide, el aficionado medio repitiendo hasta la saciedad los mismos argumentos. Cualquier atisbo del origen socializador del fútbol borrado de un plumazo (nunca mejor dicho). El fenómeno hincha dejando paso al fenómeno admirador. Ya no es que seamos sólo del Real Madrid y del Barcelona, es que vamos camino de ser de Cristiano Ronaldo, de Messi o de la estrella mediática de turno; los clubs, el fútbol, son secundarios. Bien podrían ser actores de cine, cantantes o escritores (bueno, esto quizás no); hablamos de culto a una persona, de idolatría quinceañera. Los colores, la identidad, la comunidad… todo eso toca buscarlo en otros escenarios en los que el balón sea de un material más humilde.
* Publicado en Diagonal, periódico quincenal de actualidad crítica, nº213.
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